lunes, 24 de junio de 2013

Me llegan al pincho los edificios

He vuelto a pasar por mi barrio.
Recuerdos de una infancia dura.
Pero mi barrio ya no es el mismo.
Ahora hay edificios de vidrio oscuro.
De vidrio oscuro.

Me tomé la libertad de parafrasear una canción de Micky Vainilla, para iniciar este artículo.

Hace un mes decidí dar un paseo por mi antiguo barrio y fui por una calle para fotografiar una casa y un teatro.
Cuando de pronto, descubro que los dos han sido demolidos para dar paso a un edificio de "N" pisos.

La casa.



El teatro.


Hoy en dia.




Y como si fuera poco, un centro comercial estilo "Viejo Oeste" que está al lado de lo que fueron la casa y el teatro correrá la misma suerte.













No es que me oponga al avance de la ciudad, pero si a la destrucción de casas emblemáticas y la construcción de edificios de más de 7 pisos en una calle estrecha.
Al menos podrían haber conservado la casa y el teatro. En lugar de demolerlas, podrían haberlas alquilado a alguna empresa para que instale sus oficinas allí. O incluso podrían haberlas transformado en cafeterías o restaurantes.
Y si de todas formas iban a construir edificios allí, que por lo menos conserven el estilo que tenía la calle y no sean de cemento con vidrio oscuro.

|No han caído bombas